A cada día que pasa se hace más y más patente no quizás el surgir de algo nuevo, pero si el declive de algo viejo. La política, la economía, los sistemas sociales, en definitiva todo un macromodelo de pensamiento está queriendo llegar a un pico que inevitablemente ha de desembocar en cambio.
Ese cambio es también producto de un despertar masivo, de una ola que está sacando al ser humano del letargo producido por las limitaciones cuyo máximo exponente es el miedo.
A medida que tomamos conciencia de nuestra capacidad creativa/creadora dejamos de delegar el mando y el rumbo de nuestras vidas, siendo como decía Ghandi, "el cambio que queremos ver en el mundo". Nuestro potencial es inabarcable y para nada utópico.
Utopía es solo un concepto al que alguien dio tal significado como muestra y acto de amputación de la libertad; que nosotros creamos nuestra realidad, es en sí, real.
